El Nemo (o New Metropolis) es uno de los museos más interesantes de Ámsterdam y también uno de los más populares entre las familias por sus numerosas actividades interactivas, también aptas para niños. De hecho, está especialmente diseñado para niños y jóvenes de 6 a 16 años que pueden poner a prueba sus conocimientos en diversas materias como astronomía, física, matemáticas, música y muchas otras áreas.
El museo se encuentra en un majestuoso edificio diseñado por el arquitecto Renzo Piano, que se alza cerca del Túnel del Lago IJ (también conocido como Túnel del Hielo), inaugurado en 1968 para conectar el centro de Ámsterdam con el distrito de Ámsterdam Noord.
Nemo es una instalación museística de cuatro plantas que trata temas de ciencia y tecnología de forma sencilla y entretenida a través de diversas actividades interactivas. En su interior, puedes seguir un recorrido para descubrir cómo nuestra sociedad ha evolucionado y sigue progresando no sólo científica y tecnológicamente, sino también histórica y culturalmente. En concreto, se explora el nacimiento y la evolución de instrumentos como el dictáfono, el walkman, la lámpara de cúspide de carbono, el generador de impulsos de tensión y las farolas.
Los visitantes de Nemo pueden probar suerte en varios juegos y talleres sobre temas como la electricidad, la luz, el sonido y la gravedad. Lo más destacado de Nemo es que aquí no sólo se aprende observando, sino también haciendo ejercicios y experimentando en pequeños talleres. El objetivo del museo es que todos los visitantes, independientemente de su edad, puedan ampliar sus conocimientos científicos.
Una sección especial está dedicada a la evolución de la relación del hombre con la energía, y para narrar esta relación hay más de 19.000 objetos expuestos, la mayoría de los cuales siguen funcionando y, por tanto, tienen un gran valor histórico. La exposición se divide en cuatro colecciones principales: iluminación, ingeniería eléctrica y generación y almacenamiento de energía doméstica.
El edificio Nemo, diseñado por Renzo Piano e inaugurado en 1997, es también una verdadera atracción desde el exterior, ya que está construido en una majestuosa plaza que domina la ciudad. El complejo, construido junto al túnel IJ, ostenta una silueta verde cobriza que recuerda a un barco listo para zarpar.
Si la arquitectura exterior llama la atención por su majestuosidad, el interior, en cambio, está diseñado para ser sencillo, mínimo y minimizar las distracciones. Las paredes son de un color gris neutro, las ventanas se han reducido al mínimo para favorecer la concentración en el recorrido de la exposición y la iluminación está bien pensada.
Otra característica destacada es la azotea del edificio, donde se ha construido una terraza de más de 1.000 metros cuadrados que alberga un total de 1.750 plantas individuales; también es el lugar ideal durante la estación cálida para admirar una vista espectacular de toda la ciudad.
Las entradas para el Nemo se pueden comprar cómodamente en línea o en las taquillas del museo. Como se trata de una atracción muy popular, te recomendamos que reserves tu entrada con antelación. Los niños menores de 3 años entran gratis.
Si quieres combinar la entrada al Nemo con un crucero por los canales, compra un billete combinado que te ahorrará dinero en billetes individuales.
El Museo de la Ciencia Nemo es una de las atracciones incluidas en la tarjeta I Amsterdam City Card, la tarjeta oficial de la Oficina de Turismo de Ámsterdam. Si piensas visitar varios museos y atracciones de la ciudad y viajar de forma ilimitada en transporte público, sin duda te saldrá más barato comprar la tarjeta de la ciudad en lugar de una entrada individual.
El horario de apertura de Nemo es de martes a domingo de 10.00 a 17.30 horas. Los lunes está cerrado.
Se puede llegar fácilmente a Nemo a pie desde la Estación Central, caminando unos 15 minutos. Desde la salida principal (lado central) de la estación, gira a la izquierda y sigue las indicaciones. Quienes deseen viajar en transporte público pueden tomar el autobús n.º 22 hasta la parada de Kadijksplein, situada cerca del museo.
Es fácil llegar a Nemo en coche, pero el museo no tiene aparcamiento propio, aunque hay varios aparcamientos de pago en las inmediaciones.
Nemo está situado en la zona conocida como Oosterdok (del neerlandés "cuenca oriental"), un antiguo embalse de la capital. El museo se inauguró encima del túnel IJ, que conecta el centro de la ciudad con el distrito Amsterdam Noord pasando por debajo del lago de agua dulce IJ.
La City Card le permite ahorrar en transporte público y/o entradas a las principales atracciones turísticas.