Keukenhof (literalmente “huerto”), también conocido como el Jardín de Europa, es uno de los jardines de flores más bellos del mundo. Se encuentra en Lisse, cerca de Ámsterdam, en la región de Zuid-Holland. Según los datos publicados en la página web oficial del parque de Keukenhof, cada año se plantan unos 7 millones de bulbos de flores. El parque tiene una superficie de 32 hectáreas y es uno de los destinos más famosos de los Países Bajos.
La mayor dificultad de visitar Keukenhof es el hecho de que el parque abre sólo durante poco menos de dos meses al año, a principios de primavera, el periodo en que brotan las flores de los bulbos de tulipán. Por esta razón, el número de visitantes es siempre muy alto: durante las 8 semanas de la apertura el parque es visitado por casi un millón de personas, la mayoría turistas extranjeros.
Keukenhof formaba parte de los terrenos de caza holandeses hasta el siglo XV. Después fue un terreno utilizado para el cultivo de frutas y verduras por la condesa Jacqueline de Hainaut. De ahí el nombre de Keukenhof, huerto, ya que las plantas cultivadas se utilizaban en la cocina del castillo Teylingen. En 1641 en el parque se construyó un Castillo.
El diseño del jardín se remonta al siglo XIX, cuando el barón y la baronesa Van Pallandt encargaron su construcción a dos paisajistas.
El parque fue inaugurado oficialmente en 1949. La idea inicial era crear un espacio de exposición en el que los agricultores de los Países Bajos y de toda Europa podrían mostrar sus híbridos y también ayudar al desarrollo de la exportación holandesa de bulbos: Holanda es el mayor exportador del mundo de flores.
Incluso hoy en día Keukenhof es el mayor escaparate internacional e independiente del sector de la floricultura holandesa. En el espacio de sólo ocho semanas Keukenhof muestra cada año lo que el mercado holandés tiene disponible. Por eso el parque tiene fuertes vínculos con todas las organizaciones competentes en el sector de la floricultura.
Dentro del parque de Keukenhof hay varios jardines, cada uno con un estilo particular. Hay por ejemplo, jardines de estilo Inglés, un jardín natural formado por un espejo de agua con arbustos y plantas perennes, un jardín japonés y otros muchos más, todos llenos de tulipanes y flores de todo tipo.
Cada año, un área del Keukenhof está dedicada a un tema concreto relacionado con los Países Bajos, y se compone con un enorme y maravilloso arreglo floral que lo representa. Algunos temas interesantes de los últimos años han sido “los grandes descubrimientos holandeses”, “el diseño holandés”, “las casas a lo largo de los canales holandeses” y muchos otros.
El Keukenhof no tiene vastos campos de tulipanes como se podría esperar. Hay praderas de tulipanes fuera del jardín – sobre todo privadas – que se pueden visitar, pero comprando entradas separadas. De todas maneras, se pueden fotografiar subiendo a la terraza del molino ubicado en el extremo este del parque.
Debido al gran número de visitantes del famoso parque holandés, le recomendamos que compre su entrada con antelación: elija entre una entrada única o una visita guiada desde Ámsterdam que incluya la entrada.
Si tiene previsto visitar Keukenhof por su cuenta, ya sea en transporte público o en coche, puede adquirir sólo la entrada. Debido a la gran afluencia de público, le recomendamos que la adquiera lo antes posible.
Como alternativa, puede participar en una visita guiada que también incluye el transporte en autobús desde Ámsterdam, sin duda la solución más cómoda si reside en la capital holandesa.
Si tienes intención de llegar al Keukenhof en transporte público y quizás visitar otros lugares de Ámsterdam, con la Tulip Festival Card obtendrás tanto la entrada al parque como el Amsterdam & Region Travel Ticket, que también es válido para el transporte en el centro de Ámsterdam, para los autobuses que van y vienen del aeropuerto y, por supuesto, el autobús al Keukenhof.
Una idea sin duda interesante para admirar los tulipanes en flor en su momento álgido es sin duda sobrevolar los campos en helicóptero; así podrá enriquecer su experiencia en tierra con impresionantes vistas y colores únicos desde las alturas.
Keukenhof abre cada año desde mediados de marzo hasta mediados de mayo. Las fechas exactas se comunican con suficiente antelación en la página web oficial, y varían de un año a otro.
En 2023 abrirá todos los días, del 23 de marzo al 14 de mayo, de 8.00 a 19.30 horas.
La mejor época para asistir al momento cumbre de la floración de los tulipanes es alrededor de mediados de abril, teniendo en cuenta que el clima en esta latitud es fuertemente variable.
El castillo de Keukenhof en cambio está abierto todo el año; en su interior se organizan varios festivales como el Castlefest, la Noche de Invierno y la Feria de Navidad, además de albergar conciertos de música clásica.
Si está a punto de visitar el Keukenhof, puede que el mapa del parque le resulte útil: descárguelo haciendo clic en el siguiente botón.
Mapa del parque Keukenhof en PDFLlegar a Keukenhof desde Ámsterdam es muy fácil con el transporte público: desde el aeropuerto de Schiphol de forma continuada sale el autobús número 858, denominado Keukenhof Express. La línea es operada por la empresa Arriva y el autobús sale desde la salida de Schiphol Plaza número 4, al lado del Starbucks, y llega a Keukenhof en poco más de 30 minutos, aunque con tráfico alrededor del parque la duración puede ser mucho mayor.
Se puede comprar con antelación a través de Internet un billete combinado que permite la entrada al parque y el transporte de ida y vuelta desde Ámsterdam con el autobús 858 o si no, con un suplemento, directamente desde el centro de Ámsterdam, con el bus 197, operado por la compañía Connexxion, que para por ejemplo en Leidseplein, en el Rijksmuseum y en Museumplein. La terminal del 197 es el aeropuerto de Schiphol donde tenéis que cambiar y coger el 858.
Atención
Durante los fines de semana la cola para el autobús 858 en las horas punta puede llegar a ser de cientos y cientos de metros de largo, y hay que esperar hasta tres horas antes de poder cogerlo. Es mejor llegar temprano por la mañana o por la tarde.
Llegar a Keukenhof con un coche de alquiler o incluso en bicicleta (35 km sólo ida, un paseo de unas dos horas por el hermoso campo holandés) puede ser una buena opción: en primer lugar, no hay que perder tiempo en colas para coger el autobús 858 con una espera que puede llegar a ser incluso desesperante, pero sobre todo la libertad de tener un coche permite pararse en los alrededores del parque para sacar excelentes fotos de los campos de tulipanes en flor, la postal más típica y hermosa de los Países Bajos que, lamentablemente, desde el autobús sólo se vislumbra.
Por supuesto, por otro lado, llegando a Keukenhof en coche hay dificultad para encontrar aparcamiento: aunque en estas partes de Europa la organización es muy buena, el parque durante su breve apertura anual es literalmente asediado por los visitantes, y es natural que se formen varios kilómetros de cola cerca de los accesos.
El Parque Keukenhof se encuentra en Lisse, al sur de Haarlem y al suroeste de Ámsterdam, de la que dista unos 35 km.
La City Card le permite ahorrar en transporte público y/o entradas a las principales atracciones turísticas.