Ámsterdam, aunque hace muchos años ya que es un centro internacional activo con miles de visitantes que llegan y salen todos los días, es una ciudad abierta y acogedora. Con la masiva y constante afluencia de personas que viajan por negocios o placer, todo el sector se ha focalizado eficazmente en la oferta de un nivel elevado de hoteles de lujo y restaurantes por toda la ciudad.
El mayor punto fuerte de los hoteles de lujo de Ámsterdam es, sin duda, su diversidad. Hay hoteles históricos que mantienen cierta reputación, como el Grand Hotel Krasnapolsky en la plaza Dam y el Hotel Amstel, fundados hace más de cien años, pero también hoteles modernos pertenecientes a cadenas internacionales de lujo como el Hilton, Okura o Marriott, a menudo situados en distritos más suburbanos, aunque el concepto de suburbio holandés es bastante distinto al que estamos acostumbrados.
Alojarte en hoteles históricos te permite entrar en contacto con el pasado de la ciudad. Por ejemplo, el Hotel Pulizter, que ocupa con sus 200 habitaciones más de quince antiguas casas de mercaderes, donde cada habitación se ha amueblado de forma única y especial.
Los hoteles históricos suelen estar situados en los lugares más populares del centro; es el caso del InterContinental Amstel en Leidseplein o del Grand Hotel Krasnapolsky en la Plaza Dam. Elegir un hotel de lujo situado en el centro tiene sin duda sus comodidades en cuanto a proximidad a los principales puntos de atracción.
Son muchos los servicios que se ofrecen a los huéspedes en un hotel de lujo: desde el check-in anticipado hasta el servicio de habitaciones, pasando por un servicio de traslado de ida y vuelta al aeropuerto o un mayordomo privado.
Una comodidad típica que también se respeta en los hoteles de lujo de Ámsterdam es la de ofrecer un excelente servicio de restauración a sus huéspedes. De hecho, muchos establecimientos tienen algunos de los restaurantes mejor valorados de la ciudad. La oferta gastronómica abarca desde platos internacionales a otros más locales o relacionados con los orígenes del chef encargado de la cocina.
Entre los restaurantes más reconocidos están el Restaurante Tunes en el Hotel Conservatorium, el Serre en el Hotel Okura y el Zusje de Librije, con dos estrellas Michelin, en el Hotel Waldorf Astoria.
Otra comodidad que ofrecen cada vez más los hoteles de lujo es incluir un centro de wellness en sus instalaciones. Los hay, como el Sofitel Legend, que ofrece un recorrido de spa dentro de sus instalaciones, o los hay, como el Hotel Okura, que, a falta de un espacio dentro de su estructura, ofrece entrada gratuita a gimnasios y descuentos para acceder a centros de bienestar externos.
Entre los hoteles de lujo de Ámsterdam, cada uno mantiene su propia tradición y estilo, de modo que se mantiene una clientela fija. Por tanto, la oferta hotelera es amplia y cada visitante puede encontrar el hotel que mejor se adapte a sus necesidades, dejando de lado por un momento la cartera.
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